
‘Chocó se encuentra en un nivel crítico demasiado alto’: gobernadora sobre crisis humanitaria
El departamento de Chocó, donde desde hace una semana se ha recrudecido la violencia por cuenta de enfrentamientos entre el Eln y el ‘clan del Golfo’, es una de las regiones más afectadas por la crisis humanitaria que se presenta en Colombia en este momento.
Para conocer más de cerca la situación actual del departamento, principalmente del Medio San Juan, que es la zona donde más cruenta ha sido la guerra de esta última semana, EL TIEMPO entrevistó a la gobernadora Nubia Carolina Córdoba.
Crisis humanitaria en Chocó tiene en alerta a autoridades. Foto:
Gobernadora, hablemos de ese llamado que han hecho ustedes al Gobierno Nacional desde el departamento de Chocó desde hace varios días.
Nosotros hemos venido evidenciando la grave situación de orden público y, sobre todo, de afectación a derechos humanos que se ha constituido en una crisis humanitaria al interior del departamento del Chocó, pero de manera muy específica en la cuenca media del río San Juan, en donde hemos tenido durante toda la semana anterior combates entre el Eln y el ‘clan del Golfo’ a instancias de las comunidades, en el entorno de las comunidades, donde el territorio realmente ha venido pasando por los últimos ocho paros armados que ha instituido el Eln. Es una cuenca donde, además, tienne control territorial, infortunadamente, tanto el Eln como el ‘clan del Golfo’. Donde las disputas han llevado a que el territorio esté minado y esté totalmente socavado en la posibilidad que tiene el campesino de ir al pancoger, en la tranquilidad que puede tener la comunidad de movilizarse en la zona rural, los niños de ir a la escuela. Y que ha generado, por supuesto, una gran afectación humanitaria en toda esta zona, pero que, además, hoy nos enfrentamos a una situación incluso mucho más dramática, dado que el anuncio que ha hecho el Eln sobre el paro armado de esta semana es para el cien por ciento del territorio departamental. No es específico, como en otras ocasiones, estamos hablando de un paro general en el departamento. Tomando en cuenta que el Eln tiene presencia en ambas vías, en las únicas dos vías que comunican al departamento de Chocó con el Eje Cafetero y con Medellín, pues significaría que básicamente estará confinado por setenta y dos horas el departamento.
Gobernadora, ¿cómo está la situación en el departamento en la víspera del inicio de este paro armado? Ya hay poblaciones que están confinadas, ya hay gente que ha dejado de trabajar. ¿Cómo está la sensación en la población civil en este momento?
El Eln tambien es protagonista en la crisis humanitaria en el Catatumbo. Foto:Archivo particular
La población está muy angustiada realmente. La semana anterior hubo combates que generaron un desplazamiento de unas mil personas, el confinamiento de unas quince mil. Ahora estaríamos hablando de que por lo menos la mitad de la población departamental entraría a confinamiento. Lo que va a significar este paro es que necesariamente no va a haber transporte público, no va a haber traslados ni movilización en las dos vías principales en las que se accede o desde donde se accede al centro del país. Todo el tema de suministros, de alimentos, de combustible, de medicamentos se va a detener. Todo el tema de educación y salud, trataremos lo más posible en las zonas urbanas de mantenerlo, pero en la zona rural con certeza no vamos a poder mantenerlo. Y máxime, en por lo menos ocho municipios en donde hay una incidencia directa del Eln, tomando en cuenta que este paro está anunciado por ellos, infortunadamente esto es algo que está completamente por fuera de la capacidad que tuviera cualquier mandatario local de poder darle manejo a una crisis que no solamente tiene dimensiones nunca antes vistas, sino que además se trata efectivamente de la confrontación de dos grupos muy peligrosos en el marco de sus economías ilegales, usufructuando el territorio y estrechando a la comunidad. Hoy tenemos una preocupación mayor y es que se construye una trifecta al momento de que, como lo ha anunciado la defensora del pueblo, tenemos el riesgo ya hoy de que por el Valle del Cauca puedan ingresar las disidencias de las Farc, para ahora tener tres actores armados en esta zona.
Gobernadora, ¿le han dicho algo de parte del Gobierno Nacional de medidas extraordinarias que se vayan a tomar en estos corredores? Ustedes ya las solicitaron, ¿cómo ha sido esa comunicación y qué medidas van a tomar?
Todavía no, y ese es el llamado que yo he tenido desde que se declaró el estado de conmoción a nivel nacional. Creo que precisamente estamos hablando de un estado cuyas consideraciones no solamente son atribuibles a la situación que vive el Catatumbo. Insisto, y lo he dicho varias veces, en que nos solidarizamos con el Catatumbo. Aplaudimos las medidas que se han tomado allí. Entendemos el rigor de la guerra porque vivimos el rigor de la guerra y entendemos el rigor del conflicto porque vivimos el rigor del conflicto, nadie más que Chocó puede entenderlo. Pero lo cierto es que no se trata del único territorio que está en esa afectación y no hay crisis de segunda, tercera y cuarta clase. Hoy la crisis que vive el departamento de Chocó no solamente es grave por sus números y por su afectación, por el hecho de que el territorio está minado, por el reclutamiento ilegal que están haciendo incluso de menores de edad, por la desaparición forzada que están haciendo de líderes comunitarios, sino que es grave por la cantidad de tiempo en que se ha mantenido esta afectación, por lo recurrente de los paros armados, afectando y dejando en el abandono una subregión que no solamente es estratégica para los intereses de los grupos al margen de la ley, sino que tiene ciudadanía que se merece la atención del Estado y la presencia de la Fuerza Pública. Así que hemos entendido que la profundidad, la dinámica, la dimensión de la afectación hoy no puede atenderse con menos que con medidas extraordinarias, en este caso medidas excepcionales, como las que ya se han tomado en medio de la conmoción interior para el Catatumbo. Yo conozco, sé y entiendo que hay muchos otros lugares del país en condiciones muy graves, pero que han sido la Defensoría del Pueblo y las delegaciones internacionales quienes han admitido que entre todos los puntos críticos que tiene hoy el país, el Chocó se encuentra en un nivel de criticidad demasiado alto.
Eln dice que Gobierno es responsable de crisis humanitaria. Foto:
Gobernadora, ¿qué ha ganado el Frente de Guerra Occidental del Eln cada vez que convoca y ejecuta uno de estos paros armados? Aunque usted nos dice que es la primera vez que se va a realizar este paro en la totalidad del territorio, ¿utilizan estos ceses o estos confinamientos para mover cocaína, para mover oro? ¿Qué hace el Eln en estos paros armados?
No, no es el primer paro departamental, ya los hemos tenido, solamente que dentro de la cuenta que se hacían de diez paros armados en la cuenca media del río San Juan, esto ha sido, digamos, lo más recurrente de los últimos paros. Hubo en el pasado otros del orden departamental, como va a ocurrir esta semana. El general Caicedo, que está a cargo de la Decimoquinta Brigada, precisamente decía, tanto en el Consejo de Seguridad como en un medio de comunicación recientemente, que ya se ha establecido que los paros tienen una dinámica de que cuando hay cocaína para poder movilizar, hacen paros de manera de poder mejorar su posibilidad de movilización, tanto para el tema de armamento como para el tema de los recursos ilegales que están hoy constituidos en coca y oro, y que los que buscan generar un distractor y no tener otras movilizaciones para garantizar que ellos pueden mover los recursos ilegales. Por eso yo he insistido en decir que es realmente muy difícil de aceptar que solamente el Eln y el ‘clan del Golfo’, que solamente los grupos armados al margen de la ley, puedan sustituir las ventajas estratégicas y productivas del departamento del Chocó, cuando la población ni siquiera puede producir en su propia parcela, debido a que le han minado el territorio garantizando la no movilidad de sus confrontaciones internas. El departamento del Chocó tiene toda la condición para poder producir y lo que genera es un círculo vicioso, donde la inseguridad, donde la presencia de los grupos, donde la presencia de economías ilegales hace que no podamos precisamente generar inversiones, implementar planes de desarrollo, trabajar en torno a poder traer desarrollo económico sobre todas estas zonas, y eso va generando que la precariedad en la que vive la ciudadanía no les permita avanzar en otro sentido. Así las cosas, un alcalde de esta categoría que haya pasado todo el año pasado atendiendo emergencias, confinamientos, desplazamientos y no haya podido avanzar en torno, por ejemplo, a su planificación, va a estar simplemente sometido a seguir atendiendo acciones de corto humanitario y no poder desarrollar el territorio. Para los que no conocen la cuenca media del río San Juan, es una zona muy estratégica porque parte de Izmina, que es el segundo municipio más grande del Chocó, y baja por todo el río San Juan, que desemboca unas pocas horas después, ahí al pie del puerto de Buenaventura, el límite con el Valle del Cauca, y todas las montañas que protegen toda esa zona de la cuenca media del río San Juan, la cordillera occidental, donde caemos al otro lado del Eje Cafetero o al Valle, en la zona norte del Valle del Cauca. Ustedes deben entender entonces la dimensión de la ventaja logística que tiene un departamento que es la frontera completa con Centroamérica, que tiene dos costas, que tiene ríos de movilidad, que tiene una selva que protege ese tipo de acciones y que hoy los únicos que están usufructuando dolorosamente son los grupos al margen de la ley, con sus economías ilegales porque no hay posibilidad para que puedan prosperar las planificaciones para el desarrollo de inversión social y no se va a poder por la dinámica que hoy hay. Son no solamente indicadores sociales, sino de afectación humanitaria, si no se toman medidas excepcionales, si no toman medidas extraordinarias para poder llevar desarrollo a esta cuenca. Y, por supuesto, lo que he dicho adicionalmente, con la presencia de la Fuerza Pública. No puede ser que quien tenga el control del río San Juan sea el Eln. No puede ser que no sea la Armada Nacional. Eso lo hemos insistido también reiteradamente de cara a lo que viene pasando y la potestad que tiene este grupo para poder decretar, vamos a decir, que no son una autoridad para hacerlo, pero igual lo logran hacer, decretar un paro armado.
Nubia Carolina Córdoba. Foto:Gobernación del Chocó.
Gobernadora, en la Comisión Interior decretada para el Catatumbo, el Gobierno Nacional ha decretado medidas extraordinarias como algunos tributos y la restricción también de los insumos químicos. ¿Qué tipo de medidas extraordinarias ha pensado usted que se necesitan para el departamento del Chocó?
Nosotros, en primer lugar, hemos solicitado que de manera extraordinaria se puedan asignar recursos a la Fuerza Pública para poder fortalecer su presencia y retomar el control. Hemos dicho que el departamento del Chocó está minado, lo digo cada tres días, lo digo cada dos días, lo dije en la OEA, lo digo cada vez que puedo, porque me parece que una de las afectaciones, junto con el reclutamiento infantil, más graves y de mayor lesividad frente al derecho internacional humanitario. Y en el Chocó no hay manera de hacer desminado humanitario. No podemos pensar en simplemente darles información contra el riesgo de minas cuando el riesgo de minas es inminente. Debemos hacer desminado militar y para poder hacer desminado militar hay que darle los recursos al Ejército Nacional para que pueda hacerlo, evidentemente zonificando el departamento, identificando el mayor riesgo y generando adicionalmente el desminado y esos recursos hoy no están. Hoy nosotros dependemos de la Fuerza Naval del Pacífico, que se encuentra allá en Buenaventura, que requiere mejores y mayores medios para poder hacer presencia en un departamento que mayoritariamente es fluvial. Tenemos dos vías, por el amor de Dios, y ni siquiera esas dos vías están totalmente protegidas que se pudieran hacer por vía terrestre. Y tercero, hay algo que se llama una maqueta humanitaria, que estaba a instancias del DNP, que ya había planificado una serie de inversiones que en el marco del fallido acuerdo de paz con el Eln se había establecido con, por ejemplo, muchos de los embajadores de la Unión Europea y de la cooperación internacional como garantes y como observadores, que quedó a instancias del DNP para poder generar unas inversiones básicas, de servicios básicos que se requieren precisamente para poder hacer el tránsito entre las economías ilegales imperantes en la cuenca media del Río San Juan, fuera a hacer el tránsito a las economías ilegales que puedan cambiar la connotación de productividad en esta zona y quitar de allí el foco que hoy tienen los grupos ilegales y el interés que tienen en esta zona. Eso no se puede hacer de otra manera que no sea con medidas extraordinarias, porque hoy en la estructuración fiscal, tanto del Estado como de las entidades territoriales, no existe la capacidad financiera para poder hacerse medidas adicionales. Hemos insistido, por lo tanto, que tanto cabe el Catatumbo en la conmoción interior, que, en efecto, está viviendo el país, como cabe el departamento de Chocó, por la criticidad que se ha demostrado.
Preocupa mucho el reclutamiento forzado, incluso, de niñas que están sacando de sus casas. ¿Qué es lo que está pasando? ¿Qué es eso que estamos viendo en este departamento?
Durante la semana pasada tuvimos la denuncia de que habían desaparecido dos niñas de la zona rural del litoral del San Juan, dos niñas adicionalmente indígenas que estaban en sus comunidades después de la visita de personas de uno de estos grupos, foráneas a la comunidad. Y en donde se vieron las imágenes que estaban proyectando de personas que se ven muy jóvenes, que probablemente puedan ser personas de quince o dieciséis años, como es el caso de las que han desaparecido. Eso está ocurriendo, está ocurriendo en torno al reclutamiento y al uso incluso en muchos casos donde se trata de la voluntad de los menores de irse. Pero también eso ocurre cuando los menores, los jóvenes, consideran que no hay una oportunidad de desarrollo en su territorio, que no hay un proyecto de vida, que no hay un futuro, y prefieren tomar las armas. O, perdón, no es que prefieran, es que les reclutan, siendo ellos menores, que atreven para ser parte de las armas. Es un flagelo, e insisto, junto con el minado, me parece de las peores afectaciones por las que estamos pasando hoy en torno a la infracción del derecho internacional humanitario y a los derechos humanos más fundamentales.
MARÍA ALEJANDRA RODRÍGUEZ
ANA MARÍA CUESTA
Redacción Nación y Justicia
EL TIEMPO