Un golpe tan duro como una eliminación de la FA Cup en una cuarta ronda y a manos de un equipo que es colero en la segunda división, necesariamente muestra todas las costuras. Y Liverpool no puede hacer otra cosa que enfrentarlo 

No fue solo perder 1-0 contra el modesto Plymouth, sino la manera como se cayó, sin imaginación, sin chispa y por momentos hasta sin la rebeldía que se espera de un líder de la Premier y la Champions League y que, para muchos, es el mejor equipo que de Europa en este momento. 

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​Esta vez quedaron apuntados casi todos, salvo Kelleher, que evitó un mal mayor, y especialmente el inédito tridente con Luis Díaz, Diogo Jota y Federico Chiesa, que no generó más que una acción de peligro en 90 minutos y que necesitó de Darwin Núñez al final, aunque tampoco con él aclaró las ideas.

El naufragio de la llamada ‘unidad B’ va a dejar consecuencias, empezando por el entrenador, Are Slot, quien medio confiado y medio soberbio, se privó de la opción de echar mano del banquillo de suplentes al dejar a todos ‘los muñecos’ en casa y pagarlo con una eliminación. 

¿Qué le pasa a Luis Díaz?
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Pero pasando a lo que más duele en este lado del mundo, hay que poner la lupa sobre el inicio del 2025 para Luis Díaz. Porque cuesta creer que sea el mismo que se apuntó 12 goles y 3 asistencias en un inicio más que prometedor de la actual temporada, de repente se peleó con la inspiración. 
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Este inicio del año 2025 ya es una señal de alerta, por más que el técnico Arne Slot insista en protegerlo, tal vez porque si le suelta la mano se incrimina porque fue él quien lo convirtió en centro delantero y lo sacó de la banda izquierda para hacerle espacio a Gakpo. Ahora que el paisano del DT supera a Díaz en goles y asistencias (16-5) empieza a verse el costo de esa apuesta, que fue demoledora y sorpresiva al inicio pero ahora parece pasar factura. 

Los números en lo que va corrido de este año son demoledores para Díaz: ha jugado 9 partidos con cero goles y cero asistencias. Y ojo: hace solo 1 pase clave y 1,2 tiros por partido y su puntería es de apenas el 27 por ciento. 

Más preocupante aún es su xg. ¿Qué es eso? Es la expectativa de gol de un jugador o un equipo en un periodo específico de tiempo, sea un partido o una fracción de la temporada (si un equipo o jugador anota más goles de los que sugiere su xg, podemos concluir que su definición es buena).

En ese rubro, la expectativa de Díaz es de 0,19, y sin goles ni influencias, su balance es nulo. Es más, el regate, que ha sido su fuerte desde que llegó a Inglaterra, bajó y ahora es del 58 por ciento de regates completados. Lo que no desmejoró de manera tan dramática fue la precisión del pase, que en este año va por el 82 por ciento, aunque la realidad es que sus pases son más de seguridad, más para asegurar la posesión de la pelota de su equipo que para hacer daño en campo rival. 

En marca tampoco hay buenas noticias: hace 3,3 recuperaciones por partido y gana solo el 43 por ciento de los duelos. 

Reconciliarse es ¡urgente!
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¿Qué explica entonces un promedio de 6,87 de calificación? Básicamente que es un indiscutible jugador de equipo. Su compromiso, el sacrificio sin medida que ha ofrecido siempre vestido de rojo y los movimientos que han hecho que se abran espacios para sus compañeros cuando ha integrado el tridente con Salah y Gakpo, mejoran sus registros. Una cosa es con violín y otra con guitarra, pues con Jota, Chiesa y luego con Núñez su productividad baja dramáticamente…

Pero el tema es que con este inicio de 2025 lleno de dudas no hace otra cosa que darles la razón a quienes lo critican por no ofrecer lo que Mané y sus 20 goles por temporada, no digamos Salah que lleva 18 goles y 13 asistencias.

Díaz bajó su rendimiento y cuando lo dejaron fuera de la EFL Cup contra Tottenham (jugó 8 minutos) para darle la titularidad contra Palymouth en una cuarta ronda de FA Cup, parecía una señal para que explotara su rendimiento y se reconciliara con el gol. En vez de eso quedó en la foto de la eliminación, con una pobre calificación de 4 puntos y el peso de la primera gran derrota de la era Slot sobre sus hombros. nadie apunta a los inexpertos cuando vienen los fracasos, eso les toca a las figuras. Para Díaz ya no hay mañana: necesita volver al gol cuanto antes, volver a estar fino ante el arco rival y ser determinante, no solamente importante. Ya Gakpo lo superó y tiene tres años menos. ¡Espabila Lucho! Liverpool y Colombia te necesitan siempre fino.